¿Es posible disfrutar del placer de un buen chocolate que, además de sabroso, sea más sano? Esta pregunta guió a un grupo de científicos de la Universidad de Penn State en su reciente investigación.
El chocolate ocupa un espacio muy importante en los gustos de los dulceros. Por eso, a veces, se buscan versiones menos perjudiciales para la salud, evitando un consumo excesivo de azúcar.
Las estadísticas científicas en este punto son claras, pero a la vez preocupantes: las dietas ricas en azúcares se asocian a una amplia gama de problemas de salud, desde obesidad y diabetes tipo 2 hasta enfermedades cardíacas.
Los científicos descubrieron cómo hacer del chocolate un gusto menos culposo. La solución a este dilema es más sencilla de lo que parece y resultó ser más cercana a nuestro día a día: la harina de avena.
Este ingrediente resulta ser una innovación para el rubro de la repostería saludable, capturando la atención de aquellos que buscan mejorar su dieta sin sacrificar el sabor.
John Hayes, profesor de ciencias alimentarias en la Universidad dePenn State y líder del estudio publicado en la Journal of Food Science, nos introduce a este ingrediente "secreto" que está revolucionando la manera de disfrutar las cosas dulces.
La harina de avena se obtiene de moler avena integral hasta conseguir un polvo fino y blanquecino. Este producto es una alternativa saludable para reducir el contenido de azúcar en los chocolates sin alterar su textura ni su sabor. Con alta calidad nutricional, la harina de avena es:
La investigación llevada a cabo por Hayes y su equipo se centró en la harina de avena como posible sustituto del azúcar en la producción de chocolate.
"Pudimos demostrar que existe un rango en el que se puede lograr una reducción considerable del azúcar añadido y que la gente no lo notará ni le importará, en términos de gusto", afirma Hayes.
Además, confirmaron que el chocolate elaborado con este ingrediente mantuvo su característica cremosidad y profundidad de sabor, a pesar de tener un contenido de azúcar significativamente menor.
Según revela la investigación de la Universidad de Penn State, es posible reducir hasta un 25% del azúcar añadido en el chocolate, lo que se traduce en una disminución total del azúcar de un 13,5%.
Lo más alentador de este descubrimiento, como señala Kai Kai Ma, coautora del estudio, es que la adición de harina de avena no compromete en absoluto la aceptabilidad del producto final entre los consumidores.
La investigación incluyó 2 experimentos asociados:
"Pudimos demostrar que existe un rango en el que se puede lograr una reducción considerable del azúcar añadido y que la gente no lo notará ni le importará, en términos de gusto", explicó John Hayes, autor principal del estudio.
Este descubrimiento científico abre la puerta a chocolates más saludables y contribuye a un mejor cumplimiento de las recomendaciones dietéticas actuales, promoviendo un estilo de vida más sano. Asimismo, la fibra dietética incrementada en estos chocolates favorece la digestión y ayuda a generar sensación de saciedad.